Amigos de la Barca de Jábega

VI PREMIO ALBORÁN MICRORRELATO. GANADORA Y FINALISTAS 2021

GANADORA:
María Romero PérezTanta calma
FINALISTAS:
Lucía López AlbaceteMediterráneo
Germán Mena MuñozRojo Atardecer
Celia Quintero CastroUna parada antes de llegar
Celia Carrasco GilEsther en Alborán

GANADORA

Tanta calma

Tanta calma me nubla la vista y a veces siento que vivo en una ficción, recorriendo playas trazadas con puntas de oro o zambulléndome en olas cuya espuma parece milimétricamente bordada. De niño el mar me trataba como a una muñeca de trapo: empujándome hacia la orilla, bajándome el bañador, ayudando a mis hermanos en sus intentos de ahogarme. 

Echo de menos esos arañazos, las búsquedas de conchas perfectas, los castillos de arena y los rizos indomables bañados en sal. Sentir que no pasa el tiempo, que papá llegará de un momento a otro con helados, que mamá vendrá a abrazarme para después decirme que estoy lleno de arena, que Fran agitará su pala hasta que decida levantarme y jugar con él. 

Ahora, la silla de ruedas de mamá no la deja pasear por la playa pero a veces vienen y volvemos a desayunar en el mismo sitio de siempre, que ya no es el que era pero aun así nos sentamos y fingimos que no nos damos cuenta. Papá ya no se echa tanto azúcar en el café pero sigue pidiéndoselo solo, muy solo. 

Como yo me siento, a ratos, entre tanta calma.

María Romero Pérez

FINALISTAS

Mediterráneo

Miraba distraída la lámina buscando un animal con alas para ayudarme a transitarla. En la radio escupían las cifras de los sueños frustrados y el maldito mareo de la verdad escondida salió a flote como un transatlántico y me hundió de cabeza en la corriente de los miedos como a una patera.

En mis manos: una alborada gris y borrascosa. Su piel arrugada: una rampa hacia mi conciencia pegajosa. Abrí las palmas, algas laberínticas del brusco océano surcaban la calma del cielo. ¿Es desierto o paraíso? ¿Es esto mar o infierno? Allí donde van a parar los fríos cuerpos de los muertos.

Abro los ojos y encuentro el plástico en el estómago de las ballenas, las ridículas bolas de colores en la boca de los delfines, los turistas calcinados que pasean su vacío por mi hábitat dejando los restos envasados de su derrota en cada playa.

Cierro los ojos. Escucho. Alguien corta el telón de la noche con el cuchillo de un grito. La oscuridad se retuerce entonces al compás de las olas y  juega a coser gargantas difuminando el cielo o el horizonte.

Ahora todo es uno. Ahora todo es negro. Ahora todo es muerte.

Lucía López Albacete

Rojo atardecer

El pintor recorre con su mirada la orilla. A su izquierda ve el Cabo, a su derecha, allende los límites de la vista, su imaginación dibuja Gibraltar como un espectro delimitando el camino del oleaje. Su mano se tuerce. El pincel duda. Ya la tarde se está dejando caer y él no sabe qué hacer con tanta belleza.

El poeta calla y siente. Bebe una cerveza con los pies hundidos en la arena. Busca la fórmula perfecta, la palabra precisa, el verbo hecho carne, pero sólo ve corrientes mediterráneas como la catarsis del sol rojo hundiéndose en las aguas. Derrotado, tira al suelo la libreta.

 A lo lejos, alguien canta, y dos adolescentes se besan como cachorros ajenos a los alardes del cielo.

Solo queda un niño en la playa. Acarician sus pies olas tímidas, y recoge arena con su cubo, en un intento inútil por descubrir qué habrá debajo. Las mujeres pliegan las tumbonas y los hombres desentierran las sombrillas.

Ya es de noche y todos duermen. El pintor. El poeta. El cantor, y los amantes. El niño no. Él aun sueña que juega a desbaratar las orillas.

Germán Mena Muñoz

Una parada antes de llegar

Me puse nerviosa pensando hacia donde me dirigía, así que decidí hacer una pequeña parada antes para ver a un viejo amigo.

Él siempre había sido capaz, sin decir una sola palabra, de hacerme cambiar de opinión ante las cosas y ahora, que no quería ir al entierro de mi madre, por no sentirme capaz de enfrentarme a verla por última vez, me urgía verlo.

Volver aquí se me estaba haciendo mucho más duro de lo que esperaba. Son tantos recuerdos buenos los que me abrazaban, como malos los que me golpean sin piedad.

Así que decidí pensar en los buenos, en como mi madre me había enseñado a amar a todo lo que me rodeaba y recordé la primera vez que ella me llevó a verlo, lo pequeña que me sentí al estar a su lado y cuando llegué, volví a sentir como me sobrecogía.

Me quité los zapatos y me quedé en su orilla, sintiendo el frío, la arena y las piedras que me acariciaban.

Y entonces sentí que mi madre estaba justo ahí, con mi viejo amigo, ese mar de Alborán que me vio nacer.

Celia Quintero Castro

Esther en Alborán

Mi padre y el padre de mi padre siempre me dijeron que el agua nos devuelve lo que merecemos. Si te miras en el mar descubres que el espejo es simulacro y que en algunas ocasiones el dolor refracta la luminosidad de nuestras vidas. En el fondo todo sale a flote y el mundo pasa a verse tan del revés como se vive. Las olas te remueven la memoria hasta recuperar la salazón de los recuerdos conservados de la cuna. Los cantos de sirenas en el campo de batalla chocan con el confín de libertad que al fin probó un pez ángel caído. Porque Alborán es un cielo en la tierra. Mi madre y la madre de mi madre siempre me lo han dicho. Desde que naufragamos en las costas andaluzas y allí nos acogieron. En su constelación. Como estrellas de mar rotas y apagadas: Asteroideos que al fin regenerábamos la vida.

Celia Carrasco Gil

AUTORAS Y AUTOR DE LOS MICRORRELATOS

María Romero Pérez, María Romero Pérez nació el 31 de octubre de 1998 en Benidorm (Alicante), ciudad en la que reside en la actualidad. Se graduó en Ingeniería Aeroespacial en julio de 2020 en la Universitat Politècnica de València y también se dedica a la escritura. En cuanto a su trayectoria en este último ámbito, el año 2015 resultó ganadora del X Premio Jordi Sierra i Fabra para Jóvenes con la novela Cenizas de un octubre helado, editada por SM en la colección juvenil Punto y seguido. Además de este premio, en el año 2019 también ganó el XV Certamen Literario de Relato Breve Alonso Zamora Vicente en la modalidad de relatos con su obra Pestaña vacía. Además de estas convocatorias, ha publicado microrrelatos en algunas revistas y también resultó ganadora en el I Concurso de Fotohistorias Siente.

Lucía López Albacete (1993) es una escritora y música almeriense graduada en Historia del Arte por la Universidad de Granada en 2015 que ha cursado, también el Máster de Profesorado en Educación Secundaria en la Universidad de Almería en 2019. Escribe poesía y prosa desde la adolescencia, como manera de expresión emocional y auto indagación. Ha auto publicado dos poemarios llamados “Versos lucífugos: Poemas impacientes, descomposición y biomasa” (2016) y “Españoles, Bankia ha muerto”(2018).En el plano musical, compone, canta y toca la guitarra y la batería en tres grupos: La Bilis Negra, Partenogénesis y Regomello. En la actualidad está dando sus primeros pasos en el mundo del cine en el ámbito de guión y producción de cortometrajes y largometrajes.

Germán Mena Muñoz. Mi curriculum no tiene ningún interés, tanto por previsible como por escueto. Nací, crecí, no me he reproducido y dudo que lo haga. Estudié un poco, pero me cansé enseguida, y me hice cantamañanas a media jornada. El resto del tiempo lo ocupo como banquero, masón, y coleccionista de arte en PDF.  

Celia Quintero Castro. Soy una malagueña viviendo en Almería, tuve que mudarme por trabajo y al menos tuve la oportunidad de elegir un lugar que tuviera playa. Trabajo como técnico de farmacia y tengo dos niñas pequeñas, de 3 años y otra de apenas un mes, lo cual hace que siempre tenga anécdotas divertidas para escribir. Actualmente estoy formándome como escritora, escribiendo mi primera novela siguiendo el método 3e en La Teclería.

Celia Carrasco Gil (Tudela, 2000), de 20 años, estudia Filología Hispánica en la Universidad de Zaragoza. Empezó a escribir a los 15 años y al mismo tiempo comenzó a participar en certámenes literarios a modo de entretenimiento creativo, habiendo recibido hasta la fecha 85 reconocimientos. En septiembre de 2020 publicó su primer poemario, Entre temporal y frente (ed. Olifante) y desde diciembre del mismo año forma parte de la Asociación Aragonesa de Escritores. En 2019 quedó finalista del IV Premio Alborán de Poesía y en 2020 recibió el V Premio Alborán de Poesía y quedó finalista en el V Premio Alborán de Microrrelato. 

Desde la directiva de la Asociación de Amigos de la Barca de Jábega queremos agradecer la inestimable ayuda de los miembros del jurado Eulogia G. Corral. Presidenta del Jurado